Presentamos un ejercicio del tan famoso mindfulness
que pretende lograr el desarrollo personal ayudándonos primero a
contactar con nosotr@s mism@s para adquirir un mayor grado de
autoconciencia libres de programaciones y hábitos mentales
"nocivos".
De todas formas como ya indicábamos la semana
pasada en la gran entrevista que nos concedió Sonia Barbero explicar
el mindfulness es algo que el vago lenguaje de las palabras no llega
a alcanzar adecuadamente por ello vamos a introducir una metáfora que saca a relucir una importante enseñanza del mindfulness acerca de nuestra mente para tratar de acercarnos un poquito más a la esencia de dicha practica.
LA MENTE QUE COMENTA.
En una tira cómica del The New Yorker se ve a
dos parejas en un cine. El hombre que está sentado delante se vuelve
hacia la pareja que tiene detrás, que lleva toda la películla
hablando, y les dice: "Si quisiéramos un comentario de la
película, habríamos eperado a que saliese en DVD". Como
seguramente sabrás ( y aun corriendo el grave riesgo de quitarle la
gracia al chiste), los DVD de las películas más recientes incluyen
a menudo un "comentario del director", en el que este
último, uno de los actores o alguna otra persona relacionada con el
rodaje de la película comentan lo que va ocurriendo. La película
pasa a un segundo plano y se reproduce a un volumen más bajo
mientras que la voz en off del director da su opinión personal
acerca de las más diversas circunstancias de aquélla. De forma
similar, la mente nos proporciona ese mismo tipo de comentario
constante, escena por escena. El resultado es que nuestra propia vida
se convierte en un mero telón de fondo, con el volumen reducido,
mientras que la mente charla y charla sin parar: hace comentarios,
juzga a todos y todo y da su opinión sobre lo que está ocurriendo.
El mindfulness te ofrece una alternativa al
comentario del director y a una vida con el volumen amortiguado por
el incesante comentario: una alternativa a la mente que comenta. Tu
vida existe a todo color y a volumen sinfónico en todo momento, y
puedes tomar contacto con ella cada vez que ese continuo comentario
cese. Este tipo de comentario está presente casi siempre y pocas
veces lo cuestionamos. Pero en la mayoría de las ocasiones, se
trata de un trabajo que es básicamente inútil y sin valor, que
revisa una y otra vez los mismos detalles y situaciones. Y otras
veces, la intención y el tono de la mente que comenta nos llevan
hacia el peligro con pensamientos llenos de ansiedad o visiones de un
futuro distorsionado por funestas predicciones de catástrofes y
muerte. En estos casos, la mente que comenta puede causar estragos en
nuestras vidas, arrebatándonos el rico e intenso presente y
distrayéndonos de él. en estos casos, es esencial interrumpir el
comentario si no queremos agravar nuestro sufrimiento. La conciencia
plena es la herramienta que utilizamos para conseguirlo. Nos permite
tomarnos un respiro de los juicios positivos y negativos sobre cada
escena, de decirnos a nosotros mismos lo que nos gusta y lo que no
nos gusta y de recriminarnos todas las imperfecciones y desaires que
imaginamos dentro de nosotros.
Sacado de ¡Está asqueroso!... Dame más 108
metáforas para la conciencia plena (mindfulness) de Arnold Kozak.
Las personas que vivamos en Burgos (España) estamos de suerte ya que podemos iniciarnos en la práctica del mindfulness a partir del 1 de Abril en el Foro solidario de la fundación Caja Burgos.
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