En entradas
anteriores ya presentamos la fitoterapia como aquella disciplina en la que aprovechamos el conocimiento del poder terapéutico de las plantas para promover nuestra salud.
A partir de ahora, te propondremos una planta cada mes informándote de sus beneficios y contraindicaciones. Este mes, Febrero, toca el Fresno.
Fraxinus excelsior L: Las
hojas del fresno se consumen tradicionalmente como un depurativo
eficaz para eliminar cálculos de riñón y contra las infecciones de
orina.
Posee a su vez propiedades
antiinflamatorias y analgésicas para contrarrestar los efectos de
dolencias artríticas, reumáticas y de gota.
También se utiliza la corteza por sus
propiedades febrífugas, ya que las decocciones de esta, se emplean
para calmar la fiebre en procesos gripales.
En uso externo, sirve como alivio
natural para las flebitis, varices y hemorroides, debido a sus
cualidades como venotónico.
Puede utilizarse como laxante pero
mucho cuidado con el abuso de cualquier planta para este fin, ya que
hacen que el intestino se vuelva vago, lo que a largo plazo tiene
consecuencias graves para el tránsito intestinal y en consecuencia,
para la salud.